El Documento Nacional de Identidad (DNI) o el pasaporte es una de las piezas más sensibles de la identidad digital de cualquier ciudadano. Sin embargo, en la era de la digitalización, compartir este documento en línea se ha convertido en una práctica habitual para realizar trámites como alquileres, reservas o inscripciones en plataformas digitales. A pesar de su aparente normalidad, esta acción conlleva graves riesgos de seguridad si no se toman las medidas adecuadas.
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Los peligros de compartir el DNI en Internet
Compartir el DNI sin las debidas precauciones puede abrir la puerta a múltiples riesgos cibernéticos, entre los que destacan:
- Suplantación de identidad: Los ciberdelincuentes pueden utilizar copias del DNI para abrir cuentas bancarias, solicitar préstamos, contratar servicios o incluso cometer fraudes en nombre de la víctima.
- Apertura de cuentas en casas de apuestas y plataformas ilegales: Con solo una imagen del documento, un atacante puede registrarse en servicios en línea y utilizarlos sin el consentimiento del titular.
- Fraude en alquileres y reservas: Algunos estafadores publican anuncios falsos de alquiler, piden a las víctimas que envíen su DNI como parte del proceso y luego lo usan para nuevas estafas.
- Acceso no autorizado a servicios: Algunas plataformas digitales verifican la identidad del usuario a través del DNI, lo que permite que un tercero pueda acceder a información o servicios en nombre de la víctima.
- Venta en la dark web: Existen mercados en la internet profunda donde los documentos de identidad robados se venden para diversas actividades ilícitas.
Buenas prácticas para enviar documentos de identidad de forma segura
Para minimizar estos riesgos, los expertos en ciberseguridadLas soluciones de ciberseguridad son esenciales en la era di recomiendan adoptar medidas preventivas antes de compartir cualquier documento personal en línea:
1. Verificar la legitimidad del receptor
Antes de enviar el DNI, es fundamental comprobar que la entidad o persona que lo solicita es confiable. Para ello, se recomienda verificar el sitio web, leer opiniones de otros usuarios y asegurarse de que se trata de una solicitud legítima.
2. Evitar compartir el documento en canales inseguros
Aplicaciones como WhatsApp, correo electrónico o redes sociales no son los medios más adecuados para enviar documentos sensibles, ya que pueden ser interceptados con facilidad. En su lugar, es preferible utilizar plataformas con cifrado de extremo a extremo o servicios de almacenamiento en la nube con protección de acceso.
3. Usar marcas de agua inteligentes
Una de las formas más eficaces de evitar el uso indebido del DNI es aplicar marcas de agua personalizadas. Herramientas como SaferLayer permiten añadir un texto sobre el documento con información como el propósito del envío y la fecha, lo que dificulta su reutilización para fines fraudulentos.
4. Cifrar el archivo antes de enviarlo
En caso de que sea absolutamente necesario compartir el documento, se recomienda cifrarlo con una contraseña antes de enviarlo. De este modo, solo la persona que posea la clave podrá acceder al contenido.
5. Limitar la información visible
Si la solicitud lo permite, es aconsejable ocultar datos sensibles en el documento, como el número de serie o la firma digital, dejando solo la información esencial visible.
6. Eliminar el documento una vez utilizado
Tanto el emisor como el receptor deben asegurarse de eliminar el archivo una vez que el trámite haya finalizado, reduciendo así el riesgo de exposición en el futuro.
SaferLayer: una solución sencilla para proteger tu identidad
Para facilitar la protección de documentos personales, SaferLayer ofrece una herramienta gratuita que permite añadir marcas de agua inteligentes a documentos de identidad sin comprometer su seguridad. A diferencia de otras soluciones, SaferLayer no almacena archivos en servidores, sino que realiza el proceso directamente en el navegador del usuario, evitando cualquier riesgo de filtración.
Carlos Sánchez, cofundador de SaferLayer, destaca la importancia de esta medida:
«Sabíamos que la clave para que los usuarios confiaran en la herramienta era garantizar que el documento nunca saliera de su dispositivo. Con SaferLayer, todo el procesamiento se realiza en el navegador, asegurando que los archivos no sean accesibles por terceros.»
Además, la herramienta es totalmente funcional sin conexión a internet, lo que refuerza su seguridad.
«Puedes añadir SaferLayer a tu pantalla de inicio y activarlo incluso en modo avión. Verás que puedes seguir utilizándolo sin problemas.»
Un hábito de seguridad necesario en la era digital
A medida que crecen los riesgos de suplantación de identidad y fraude, proteger los documentos de identidad se ha vuelto una necesidad más que una recomendación. La combinación de herramientas especializadas como SaferLayer, buenas prácticas y el uso de canales seguros puede marcar la diferencia entre una gestión digital segura y una experiencia vulnerable a ciberataques.
Antes de compartir un documento personal, conviene preguntarse si se están tomando todas las precauciones necesarias. La seguridad digital empieza con pequeñas acciones que pueden evitar grandes problemas.
vía: Noticias Seguridad e INCIBE