El avance imparable de la inteligencia artificial no solo está revolucionando sectores enteros, sino que también está transformando la propia profesión del ingeniero de software. Mike Krieger, cofundador de Instagram y actual jefe de producto en Anthropic, ha sido contundente en una reciente entrevista en el pódcast de 20VC: dentro de tres años, los ingenieros pasarán más tiempo revisando código generado por IA que escribiéndolo ellos mismos.

De programadores a supervisores de calidad

Según Krieger, el papel del ingeniero evolucionará hacia un perfil más estratégico y de alto nivel, centrado en validar, ajustar y supervisar el código creado por modelos avanzados de lenguaje como Claude, de su propia compañía. «Se trata de encontrar las ideas adecuadas, diseñar correctamente la interacción con el usuario y comprobar todo a gran escala, algo que solo un equipo humano puede valorar en profundidad», explicó.

Este cambio no implica la desaparición del rol del ingeniero, sino una redefinición de sus habilidades. La IA puede encargarse de tareas repetitivas y de la generación masiva de código, pero la supervisión, la comprensión profunda de los objetivos y el contexto siguen siendo tareas irremplazables por el momento.

¿Es la IA una amenaza o una aliada?

El debate sobre si la inteligencia artificial reemplazará a los desarrolladores sigue abierto. Dario Amodei, CEO de Anthropic, ha ido un paso más allá afirmando que en los próximos 3 a 6 meses la IA podría escribir hasta el 90 % del código, y en menos de un año, prácticamente todo. Sin embargo, el propio Amodei reconoce la necesidad de ingenieros, como demuestra la fuerte contratación en su empresa.

Mark Zuckerberg, CEO de Meta, adopta un enfoque más prudente y prevé que para 2025 las IA serán capaces de escribir código al nivel de un ingeniero intermedio, pero siempre con humanos supervisando el proceso.

La realidad actual: IA como herramienta de productividad

El presente ya apunta hacia ese futuro. La encuesta de desarrolladores de Stack Overflow a mediados de 2024 mostró que el 82 % de los programadores utilizan herramientas de IA para escribir código. En la misma línea, JetBrains estima esta cifra en un 69 %.

GitHub destaca un aumento de hasta el 55 % en la productividad gracias a los asistentes de programación, y lo más revelador: cerca del 90 % de los desarrolladores en Estados Unidos y más del 80 % en la India consideran que estas herramientas mejoran la calidad del software que producen.

Krieger lo resume claramente: la IA no va a robar el trabajo a los ingenieros de software; va a transformar su labor. La clave no será solo programar, sino ser capaces de gestionar, revisar y guiar a sistemas cada vez más autónomos. En otras palabras, los humanos seguirán siendo esenciales en el proceso, aunque su función se aleje cada vez más del teclado y se acerque más al liderazgo y la supervisión estratégica.

Referencias: Error500, Hipertextual y El chapuzas informático.