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Los aranceles de Trump golpean a AMD: la compañía asume 800 millones de dólares en gastos adicionales

La tecnológica estadounidense se une a NVIDIA entre las principales afectadas por las restricciones comerciales de EE.UU. a China, que también paralizan la exportación de sus GPU MI308 para inteligencia artificial.

Los recientes aranceles impulsados por Donald Trump como parte de su renovada estrategia comercial están teniendo un impacto económico directo y severo sobre las grandes tecnológicas estadounidenses. En este caso, AMD ha confirmado que deberá asumir hasta 800 millones de dólares en costes adicionales derivados de los nuevos gravámenes a productos procedentes de China, así como por las restricciones que impiden exportar sus chips de inteligencia artificial a ese país.

Un coste millonario en inventario, reservas y compromisos de compra

Según ha comunicado la propia AMD, los 800 millones de dólares se desglosan en cargos relacionados con inventario inmovilizado, reservas estratégicas y compromisos de compra ya adquiridos antes del cambio de normativa. Esta cifra es menor que los 5.500 millones que NVIDIA ha reconocido como impacto por la prohibición de venta de su GPU H20 a China, pero representa igualmente un revés importante para la compañía dirigida por Lisa Su.

Las nuevas tarifas impuestas por la administración Trump han ido incrementándose de forma progresiva. Si bien inicialmente se hablaba de un arancel del 54 % para ciertos productos chinos, ahora algunos sectores clave —como el tecnológico— ya están sujetos a tasas que superan el 245 %, según ha trascendido. El objetivo de estas medidas es reducir la dependencia de productos manufacturados en China, aunque su efecto colateral ha sido inmediato sobre los márgenes de empresas como AMD.

Las GPU MI308 para IA, bloqueadas para el mercado chino

Además de los costes arancelarios, AMD también se ha visto afectada por las nuevas restricciones en la concesión de licencias de exportación a China para hardware de inteligencia artificial. Esto incluye la paralización de la venta de sus GPU MI308X, diseñadas específicamente para competir en el mercado chino de IA.

Estas unidades gráficas —una versión adaptada y limitada en prestaciones respecto a los modelos vendidos en Occidente— se han quedado fuera del mercado objetivo, ya que, como recuerda AMD, nunca se han concedido licencias de exportación para este tipo de chips desde el inicio de las sanciones.

En este contexto, AMD considera improbable que vaya a recibir autorización para comercializar sus GPU en China, lo que implicará un ajuste en su estrategia global, tanto en términos de ingresos como en planificación de producción.

Una guerra comercial con impacto global

China, considerada como la «fábrica del mundo», ha sido el país más castigado por las medidas comerciales de la administración estadounidense. Esto no solo ha afectado al hardware, sino a toda la cadena de producción global: desde teléfonos móviles hasta componentes de servidores, pasando por productos de consumo como juguetes, calculadoras o pequeños electrodomésticos.

El resultado es una ola de incertidumbre que golpea al corazón de la industria tecnológica global, obligando a las empresas a replantear su cadena de suministro, renegociar contratos y adaptar sus desarrollos a nuevas realidades geopolíticas.

AMD, atrapada entre Washington y Pekín

El caso de AMD refleja las dificultades que enfrentan muchas multinacionales con fuerte presencia en ambos mercados. Si bien el objetivo de las políticas de Trump es incentivar el desarrollo y la producción local, el corto plazo está lleno de turbulencias económicas, especialmente para compañías que dependen en gran medida de las ventas internacionales y de una cadena global de valor altamente interconectada.

En este escenario, tanto AMD como otras tecnológicas afectadas deberán buscar nuevas fórmulas para diversificar su producción, evitar dependencias excesivas y mitigar riesgos geopolíticos. Pero por ahora, el coste ya se ha materializado: 800 millones de dólares y un futuro incierto en el mayor mercado del planeta.

vía: Reuters

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