La geografía insular de Maldivas obliga a pensar la infraestructura digital como una red de nodos resilientes, cercanos al usuario y capaces de mantener el país en línea incluso cuando la logística se complica. En ese tablero, Dhiraagu ha puesto hoy una pieza clave: la inauguración de su tercer centro de datos, ubicado en la isla de N. Velidhoo y clasificado como Tier III Ready. La ceremonia, presidida por el CEO y director general de la compañía, Ismail Rasheed, y el presidente del Consejo Insular de Velidhoo, Athif Hussain, marca un nuevo hito en la expansión de la capacidad crítica que sostiene la transformación digital del archipiélago.
El nuevo Tier III Ready Data Centre nace con una promesa concreta: acercar el cómputo y el almacenamiento a los puntos donde se genera y se consume el dato. Para resorts, pymes y grandes empresas repartidas por los atolones, poder alojar y proteger sus sistemas “cerca de la operación” significa menos latencia, mayor eficiencia en servicios en la nube y continuidad de negocio reforzada ante incidencias de red o logística. Para las administraciones y los proveedores de servicios críticos, supone más robustez en aplicaciones sensibles, desde plataformas de atención ciudadana hasta sistemas internos que no admiten paradas.
La puesta en marcha de Velidhoo llega, además, pocos meses después de otro hito: el **primer y único centro de datos con certificación Tier IV del país, inaugurado por Dhiraagu en Hulhumalé a comienzos de año. Con la pareja Tier IV + Tier III Ready, la telco maldiva eleva el listón nacional de fiabilidad y tolerancia a fallos, construyendo una malla de servicios que combina máximo nivel de resiliencia con capacidad de crecimiento donde más se necesita.
Qué aporta un centro Tier III Ready en un país de islas
En el estándar del Uptime Institute, la categoría Tier III está pensada para instalaciones con mantenibilidad concurrente: es decir, la infraestructura puede someterse a tareas de mantenimiento planificado sin impacto en la operación, gracias a redundancias del tipo N+1. El sufijo “Ready” indica, en terminología de mercado, que el diseño y la construcción están alineados con los requisitos de esa categoría y que la instalación está preparada para completar el proceso de certificación formal. Sin entrar en detalles técnicos específicos —no divulgados—, el salto respecto a instalaciones sin esta clase de diseño se traduce en:
- Mayor disponibilidad: posibilidad de sustentar trabajos de mantenimiento sin interrupciones del servicio.
- Reducción de riesgo operativo: rutas alternativas de energía y climatización, con componentes redundantes.
- Escalabilidad más ordenada: capacidad de crecimiento que no compromete la continuidad.
En un país con dispersión geográfica y climas cambiantes, estas virtudes no son un lujo, son un requisito. Las distancias entre islas y la dependencia de conexiones marítimas o aéreas hacen que reducir los “saltos” que da un dato —del dispositivo al servidor y vuelta— tenga impacto directo en latencia, calidad de servicio y resiliencia.
Tier III vs Tier IV, en una mirada
| Aspecto | Tier III | Tier IV |
|---|---|---|
| Objetivo | Mantenibilidad concurrente (N+1) | Tolerancia a fallos total (2N/2(N+1) y compartimentación) |
| Interrupciones por mantenimiento | No deberían afectar a la carga | No deberían afectar incluso ante fallos simultáneos |
| Casos de uso típicos | Empresas y servicios críticos con altas exigencias de disponibilidad | Misión crítica con requerimientos máximos de continuidad |
| Implicaciones de diseño | Redundancia en rutas de energía y climatización; compartimentación parcial | Redundancia completa, aislamiento y automatismos para fallo con continuidad |
Nota: “Tier III Ready” suele referir a alineamiento de diseño y preparación para certificación; “Tier IV Certified” implica certificación completa por Uptime Institute.
Impacto en la economía local: del resort a la pyme (y viceversa)
El tejido económico maldivo —con un turismo de alto peso específico, una cadena de suministro extendida por atolones y un creciente ecosistema digital— necesita plataformas cercanas y predecibles. El nuevo centro de Velidhoo incide en varias palancas:
- Proximidad y latencia: alojar motores de reservas, operaciones hoteleras, sistemas de pagos o analítica a pocos “saltos” de red reduce tiempos de respuesta y mejora la experiencia de usuario.
- Continuidad de negocio: replicación local y planes de recuperación ante desastres más ajustados a la geografía real, con menor dependencia de enlaces de larga distancia.
- Cumplimiento y confianza: para sectores regulados o sensibles, la ubicación del dato y su protección bajo estándares internacionales son un argumento de peso en auditorías y contratos.
- Eficiencia operativa: al descargar tráfico de larga distancia y optimizar rutas, se contienen costes de backhaul y se gana estabilidad en picos de demanda (temporadas altas, eventos).
El resultado no es solo técnico. Cuando un proveedor local ofrece Tier III Ready y Tier IV Certified bajo un mismo paraguas, el país gana capacidad de negociación y velocidad de despliegue: menos fricción para que nuevos servicios —desde nubes híbridas hasta plataformas de datos— se activen sin sacrificar seguridad ni fiabilidad.
Reforzar la “columna vertebral” digital: de la nube al borde
El anuncio de Dhiraagu habla de reforzar la infraestructura digital y mejorar la eficiencia de servicios en la nube y aplicaciones críticas. Traducido al día a día, significa facilitar arquitecturas híbridas donde una parte del cómputo viva en el país (para cargas sensibles o con requisitos de latencia) y otra parte escale en clouds globales. La ventaja de sumar un punto Tier III Ready en Velidhoo, con un Tier IV en Hulhumalé, es que aparece un “tejido” con opciones de distribución:
- Activos en activo-activo / activo-pasivo entre islas, con objetivos de recuperación (RTO/RPO) más realistas.
- Servicios de borde (edge) para contenido, aplicaciones móviles o IoT que no siempre requieren saltar al exterior.
- Rutas de mantenimiento y actualizaciones que no obligan a ventanas de corte prolongadas.
Para clientes con operaciones en varios atolones, esta diversidad geográfica puede ser la diferencia entre “seguir abiertos” o “poner el cartel de mantenimiento” cuando surgen contingencias.
¿Qué no se ha comunicado (y por qué importa)?
Como sucede en muchos anuncios de infraestructura, Dhiraagu no ha hecho públicos detalles como capacidad energética, número de racks, PUE, conectividad de red o fechas objetivo de certificación plena del Tier III, más allá del estatus Ready. No es extraño: son parámetros que dependen del crecimiento por fases, de acuerdos con clientes y de condiciones de suministro. Aun así, empresas y administraciones interesadas deberían solicitar:
- Hoja técnica con capacidad inicial y plan de expansión.
- Topología de red (enlaces, rutas alternativas, niveles de redundancia).
- SLA de disponibilidad y tiempos de respuesta (soporte, escalado).
- Políticas de seguridad y certificaciones adicionales (ISO 27001, ISO 22301, etc., si aplican).
Un paso más en una estrategia de país
De fondo, la inauguración de Velidhoo encaja con una narrativa más amplia: Maldivas quiere ser algo más que un destino turístico; aspira a diversificar su economía y a blindar la continuidad de sus servicios en un contexto global de digitalización acelerada. Centros de datos con estándares internacionales, desplegados cerca de los usuarios e integrados en una red resiliente, son un eslabón imprescindible de ese objetivo.
El movimiento también envía una señal a socios tecnológicos y clientes internacionales: hay capacidad local, compromisos de calidad (Tier IV y Tier III Ready) y voluntad de inversión para acompañar proyectos ambiciosos, desde nubes privadas/híbridas hasta plataformas de analítica avanzada y servicios digitales de nueva generación.
Claves prácticas para empresas que evalúan su migración a Velidhoo
- Evaluar la carga: identificar qué aplicaciones mejoran con menor latencia o mayor proximidad (ERP, PMS en resorts, booking, POS, analítica en tiempo real).
- Diseñar la resiliencia: definir RTO/RPO y decidir si conviene un esquema activo-activo con Hulhumalé (Tier IV) como ancla y Velidhoo (Tier III Ready) como sitio de distribución o DR.
- Planear el tránsito: coordinar ventanas de migración, pruebas de conmutación y validaciones de rendimiento.
- Seguridad y cumplimiento: alinear controles (accesos, cifrado, monitorización) con políticas corporativas y marco regulatorio local.
- Optimizar costes: comparar modelo colo vs servicios gestionados, y evaluar ahorros en backhaul, tiempos de respuesta y coste de indisponibilidad.
Conclusión: más cerca, más robusto, más preparado
El nuevo Tier III Ready de N. Velidhoo no es solo una infraestructura técnica; es un compromiso con la disponibilidad, la seguridad y la eficiencia de los servicios digitales de Maldivas. Sumado al Tier IV de Hulhumalé, dibuja una columna vertebral que permite a empresas y administraciones planificar en serio su futuro digital: con redundancias reales, latencias menores y una ruta clara para escalar en la nube sin perder el control de los datos. En un país de islas, construir cerca del usuario es construir mejor.
Preguntas frecuentes
¿Qué significa que el centro de N. Velidhoo sea “Tier III Ready”?
“Tier III Ready” indica que el diseño y la construcción del centro están alineados con los requisitos de Tier III (mantenibilidad concurrente, redundancias N+1) y que la instalación está preparada para completar la certificación formal ante Uptime Institute. Ofrece alta disponibilidad y posibilidad de mantenimiento sin corte del servicio.
¿En qué se diferencia un centro Tier IV del nuevo Tier III Ready?
Tier IV aporta tolerancia total a fallos, con redundancia 2N o 2(N+1) y compartimentación que evita caídas incluso ante múltiples fallos simultáneos. Tier III garantiza mantenibilidad concurrente y alta disponibilidad, siendo idóneo para la mayoría de cargas empresariales críticas. Ambos comparten el foco en fiabilidad y seguridad, con distintos niveles de redundancia y complejidad.
¿Qué ventajas concretas obtienen los resorts y empresas al alojar en Velidhoo?
Menor latencia al tener el dato cerca de la operación, mejores tiempos de respuesta en aplicaciones de negocio, continuidad reforzada gracias al diseño Tier III, y comodidad operativa (gestión local, soporte más cercano). Además, la proximidad puede optimizar costes de comunicaciones y simplificar el cumplimiento de requisitos de protección de datos.
¿Cómo puede integrarse Velidhoo con el Tier IV de Hulhumalé y con nubes públicas?
Velidhoo puede funcionar como sitio primario o secundario dentro de un esquema activo-activo o activo-pasivo con Hulhumalé como par de alta resiliencia. Para cargas que necesiten escalar globalmente, se puede optar por un modelo híbrido, manteniendo datos sensibles y servicios de baja latencia en país y consumiendo servicios públicos en la nube para picos o analítica avanzada.
vía: Dhiraagu