La presión política y mediática crece sobre Lip-Bu Tan tras la publicación de una carta del senador Tom Cotton y la reacción del expresidente estadounidense en Truth Social
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha solicitado públicamente la dimisión inmediata de Lip-Bu Tan, actual CEO de Intel, acusándole de representar un riesgo para la seguridad nacional. El mensaje fue lanzado desde su red social Truth Social, acompañado de una carta enviada por el senador republicano Tom Cotton a la cúpula de Intel, en la que se detalla una serie de preocupaciones sobre los presuntos vínculos del ejecutivo con empresas chinas de tecnología con lazos militares.
Lip-Bu Tan fue nombrado CEO de Intel en marzo de 2025 tras la sorpresiva salida de Pat Gelsinger, quien habría sido obligado a dimitir por el consejo de administración. Sin embargo, la llegada de Tan ha reavivado antiguos temores sobre la posible influencia del Partido Comunista Chino en compañías clave del sector tecnológico estadounidense.
Las acusaciones
En la carta del senador Cotton se exponen tres puntos críticos:
- Vínculos de Tan con empresas chinas: durante más de una década, Lip-Bu Tan ha invertido más de 200 millones de dólares en cientos de compañías tecnológicas chinas, algunas de ellas presuntamente relacionadas con el Ejército Popular de Liberación de China.
- Antecedentes con Cadence Design Systems: la empresa que Tan dirigió anteriormente se declaró culpable de vender tecnología de forma ilegal a una universidad militar china. Según Cotton, estos hechos ocurrieron bajo su liderazgo directo.
- Conflictos de interés: se cuestiona si Tan ha comunicado adecuadamente al gobierno de EE. UU. sus vínculos financieros y empresariales con China, especialmente en lo que respecta a los contratos federales de Intel, como el programa Secure Enclave.
Cotton, férreo defensor de una línea dura contra Pekín, exige respuestas inmediatas sobre si el consejo de Intel investigó adecuadamente estos antecedentes antes de contratar a Tan, si el directivo se desvinculó realmente de sus inversiones en empresas chinas y si se notificaron posibles conflictos de interés al gobierno federal.
Impacto económico y político
Las declaraciones de Trump y Cotton no han pasado desapercibidas para el mercado. Las acciones de Intel cayeron un 3,25 % tras la publicación de la carta y el post de Trump, situándose por debajo de los 20 dólares por acción, muy lejos de su valor histórico y de competidores como AMD, cuyas acciones superan los 175 dólares en la actualidad.
Esta diferencia bursátil no solo refleja el declive de Intel en los últimos años, sino que también pone en entredicho el futuro de Intel Foundry, la división estratégica con la que la empresa pretende recuperar su liderazgo frente a TSMC, Samsung y otros gigantes del sector.
Trump, que ha hecho del conflicto con China un eje central de su discurso político, señaló que no se puede permitir que una empresa que ha recibido casi 8.000 millones de dólares en subvenciones del programa CHIPS and Science Act esté dirigida por una persona “con lazos cuestionables con el Partido Comunista Chino”.
¿Y ahora qué?
Intel no ha emitido todavía una respuesta oficial a las acusaciones ni a la petición directa de Trump. Sin embargo, la presión mediática y política aumenta, especialmente cuando se suman voces dentro del Partido Republicano que exigen una revisión del nombramiento y posibles consecuencias regulatorias si no se actúa con transparencia.
El escándalo llega en un momento clave, cuando Estados Unidos se encuentra en plena guerra tecnológica con China, y Washington está tratando de fortalecer su independencia en chips a través de inversiones estratégicas, subsidios públicos y alianzas internacionales.
La figura de Lip-Bu Tan, empresario de origen malasio con una larga trayectoria en Silicon Valley y en la inversión tecnológica asiática, se ha convertido así en el epicentro de un nuevo conflicto entre política, seguridad nacional e industria.
Preguntas frecuentes
¿Quién es Lip-Bu Tan, actual CEO de Intel?
Es un reconocido ejecutivo tecnológico que lideró Cadence Design Systems y ha sido inversor en decenas de empresas tecnológicas, muchas de ellas en China. Fue nombrado CEO de Intel en marzo de 2025.
¿Por qué se cuestiona su nombramiento?
Por sus inversiones anteriores en empresas vinculadas al ejército chino y por una condena de Cadence Design Systems, bajo su liderazgo, por vender tecnología a una universidad militar en China.
¿Qué implicaciones tiene esto para Intel?
Podría enfrentar mayor escrutinio regulatorio, afectar sus contratos con el gobierno de EE. UU., e impactar negativamente en su valor bursátil y su estrategia a largo plazo.
¿Qué es el programa CHIPS and Science Act?
Es una ley estadounidense que destina fondos públicos para impulsar la fabricación de semiconductores en EE. UU. Intel ha recibido casi 8.000 millones de dólares a través de este programa.