La compañía china Tencent ha puesto un freno a la creciente euforia que rodea a NVIDIA tras su exitoso evento GTC 2025. A pesar del despliegue tecnológico sin precedentes de la empresa estadounidense, el valor de sus acciones ha caído más de un 5 % en los últimos días. La razón parece estar en el escepticismo del mercado y las señales que llegan desde China, donde empresas como Tencent están demostrando que el futuro de la inteligencia artificial (IA) no pasa necesariamente por acumular cada vez más GPU.
Optimización frente a fuerza bruta
James Mitchell, director de operaciones de Tencent, ha sido claro en sus declaraciones: la industria ha dejado atrás la creencia de que cada nueva generación de modelos de lenguaje (LLM) necesita un orden de magnitud superior en GPUs. En palabras del propio Mitchell:
“Hubo un período de tiempo el año pasado en el que se creía que cada nueva generación de LLM requería un orden de magnitud más de GPU. Ese período terminó con los avances que demostró DeepSeek. Ahora la industria, y nosotros dentro de ella, estamos logrando una productividad mucho mayor en el entrenamiento de LLM con las GPU existentes, sin necesidad de añadir más GPU al ritmo que antes se esperaba”.
La irrupción de DeepSeek, ofreciendo acceso gratuito a modelos de IA que igualan o superan el rendimiento de soluciones estadounidenses con menor infraestructura, ha sido un revulsivo en el sector. Por su parte, Tencent con su modelo Hunyuan Turbo S ha demostrado que la optimización y la eficiencia en el uso de recursos pueden marcar la diferencia.
China apuesta por eficiencia y menor gasto
En el mismo sentido, Mitchell ha subrayado que las empresas tecnológicas chinas gastan menos en inversión de capital (CapEx) respecto a sus ingresos en comparación con sus homólogas occidentales. No obstante, esta política de gasto más contenido no está repercutiendo negativamente en sus resultados. Al contrario, se está traduciendo en una mejor gestión de los recursos y un aprovechamiento más inteligente del hardware disponible.
“Las empresas chinas priorizan en general la eficiencia y la utilización eficiente de los servidores con GPU, y eso no necesariamente afecta negativamente la efectividad final de la tecnología que están desarrollando. El éxito de DeepSeek simbolizó y solidificó esa realidad”, afirmó Mitchell.
El mercado reacciona con escepticismo
La reacción de los inversores al GTC 2025 de NVIDIA es un claro indicador de que el mercado empieza a cuestionar el modelo basado en fuerza bruta y consumo masivo de hardware. La incertidumbre sobre si realmente será necesario seguir adquiriendo GPU al ritmo frenético que se había pronosticado pesa sobre la cotización de la compañía.
NVIDIA, que ha invertido más de 150.000 millones de dólares en ampliar su capacidad de producción y ofrecer soluciones para entrenar modelos cada vez más complejos, podría encontrarse ante un escenario menos favorable si la industria opta por la senda de la eficiencia. La “burbuja” de la IA basada en GPU podría estar mostrando sus primeras señales de fatiga.
Por ahora, China ha demostrado que se puede competir y ganar en la carrera de la IA sin seguir el modelo consumista que impera en Estados Unidos. El futuro inmediato dirá si la apuesta por la optimización desplaza a la fuerza bruta como estrategia predominante.
