Por qué todos los días deberían ser el Día Mundial del Backup

El próximo día 31 de marzo se celebra el Día Mundial del Backup, un día que debe servir a las empresas para reflexionar sobre la estrategia que siguen a la hora de proteger su información. Debido a lo valioso de la información, las empresas no deberían permitirse el lujo de realizar solo una copia de seguridad al año, sino hacerlo de forma más periódica.

El ransomware sigue siendo una amenaza en 2023 y los líderes empresariales deben ser proactivos en sus planes de protección de datos. Los hackers también atacan los sistemas de copia de seguridad, lo que dificulta la restauración y la hace más costosa. Las organizaciones necesitan una estrategia de doble protección: copias inmutables y avanzadas de datos, y la capacidad de realizar copias y restauraciones rápidas y a gran escala. Las copias inmutables están protegidas contra la eliminación, modificación o cifrado, y son relativamente fáciles de restaurar.

Las copias de seguridad tradicionales pueden tardar demasiado en restaurarse, causando pérdidas financieras y de reputación significativas. Las soluciones basadas en flash pueden ofrecer velocidades de hasta 270 TB por hora y son necesarias para que una organización pueda volver a operar con un impacto negativo mínimo.

Las organizaciones deben comprender sus datos, las políticas de retención y diseñar medidas para evitar almacenar datos innecesarios. También deben verificar que las capacidades de copia y restauración de seguridad puedan crecer junto con los datos protegidos. Con una estrategia respaldada por copias inmutables y una solución escalable de restauración rápida, la restauración tras un ataque de ransomware puede reducirse de semanas a solo horas, reduciendo el impacto en los usuarios, clientes y la reputación de la empresa.

Un ejemplo exitoso de esta estrategia es Admiral, que eligió Pure Storage FlashBlade con SafeMode™ y Veeam para proteger sus bases de datos de Oracle. Antes, les llevaba 30 horas realizar copias de seguridad, ahora solo tardan 40 minutos y cumplen con los estándares de recuperación. Con una estrategia adecuada, las empresas pueden estar protegidas todo el año.

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