La reciente publicación de la sentencia del Juzgado de lo Mercantil nº 6 de Barcelona ha confirmado lo que desde hace meses se aplicaba en silencio: LaLiga y Telefónica cuentan con respaldo judicial para bloquear direcciones IP en España como parte de su ofensiva contra la piratería audiovisual. El fallo, fechado en diciembre de 2024, autoriza no solo los bloqueos ya en marcha, sino también su actualización dinámica hasta el final de la temporada 2026/2027. Todo, sin necesidad de notificación previa a los usuarios ni garantías técnicas para evitar daños colaterales.
Una campaña silenciosa, ahora con aval judicial
Desde febrero, miles de webs se han visto afectadas por los bloqueos masivos de IPs en operadoras como Movistar, O2, Vodafone o Digi. Aunque en teoría se trata de direcciones utilizadas para retransmitir partidos de fútbol de forma ilegal, en la práctica muchas de ellas pertenecen a infraestructuras compartidas como Cloudflare, por lo que el daño se extiende a páginas perfectamente legales que simplemente comparten la misma red.
El fallo, al que ha tenido acceso este medio, no incluye el listado completo de las IPs inicialmente bloqueadas, ni establece obligaciones de transparencia hacia los usuarios. Tampoco exige comprobaciones técnicas para evitar falsos positivos, lo que ha generado alarma entre expertos y administradores de sistemas.
Nuevas tecnologías, nuevas amenazas (según LaLiga)
El texto judicial recoge que LaLiga y Telefónica han señalado a tecnologías como ECH (Encrypted Client Hello) de Cloudflare y Private Relay de Apple como elementos que dificultan la aplicación efectiva de bloqueos basados en dominios. Estas herramientas, pensadas para proteger la privacidad del usuario, encriptan partes clave del tráfico web, lo que impide a los operadores inspeccionar qué sitios están siendo visitados. Para los demandantes, estas tecnologías favorecen el anonimato de las plataformas pirata.
En respuesta, la sentencia autoriza el bloqueo en base a IPs, permitiendo que los listados se actualicen en tiempo real los días de partido, incluso durante el evento en curso. Las operadoras deben ejecutar los bloqueos “lo antes posible”, en algunos casos sin que el usuario reciba ningún tipo de aviso.
Un sistema sin oposición y con escaso control
Todos los operadores demandados —Movistar, Vodafone, Digi y MásOrange— se allanaron al procedimiento, es decir, aceptaron las medidas sin plantear oposición judicial. Esta falta de resistencia ha facilitado una sentencia rápida y firme, pero también ha generado críticas por parte de organizaciones defensoras de los derechos digitales, que ven con preocupación cómo se consolidan mecanismos de censura técnica sin debate público ni análisis de impacto.
Además, la resolución establece que los bloqueos podrán continuar más allá de la actual temporada, reanudándose tras el parón veraniego a partir del 16 de agosto de 2025, cubriendo toda la vigencia del actual contrato de derechos televisivos entre LaLiga y Telefónica.
¿Un precedente para el futuro?
Este caso marca un hito en España en cuanto al uso judicial de técnicas de filtrado y bloqueo en la red. Mientras LaLiga defiende su derecho a proteger sus contenidos ante una piratería en constante evolución, muchos expertos advierten de que el fallo abre la puerta a un modelo de control extensivo sin suficientes garantías.
La sentencia considera que el “allanamiento” de las operadoras “no perjudica a terceros”, ignorando las numerosas quejas de administradores y desarrolladores cuyas webs han sido bloqueadas sin relación alguna con actividades ilícitas.
En un contexto de creciente tensión entre derechos de autor, privacidad y libertad de acceso a la información, el caso LaLiga–Telefónica podría marcar un antes y un después en la forma en que se entiende la gobernanza de internet en España. Ahora, con la sentencia ya disponible (aunque incompleta), queda en manos de la sociedad civil, los juristas y el ecosistema tecnológico abrir un debate que hasta ahora ha sido deliberadamente silenciado.
Vía: Banda Ancha, Redes Sociales y Poder Judicial
Ilustración vía AI free images.