Gigas Hosting, compañía española especializada en servicios de cloud y soluciones gestionadas, ha cerrado una nueva operación de financiación con la que busca reforzar su hoja de ruta de crecimiento. El fondo Inveready ha aportado 7,5 millones de euros mediante una emisión de obligaciones convertibles en acciones con vencimiento a cinco años, una fórmula habitual cuando el objetivo es aportar capital sin ejecutar una ampliación inmediata y dejando abierta la conversión a equity más adelante.

La operación, comunicada al BME Growth, se estructura en dos tramos por un importe total de 7,5 millones. Estas obligaciones podrán convertirse en acciones de Gigas a un precio ponderado de 4,37 euros por título, y la conversión estará disponible a partir del mes 19 desde la suscripción. La compañía ha señalado que destinará los fondos a reforzar el crecimiento orgánico de sus principales líneas de actividad.

Qué significa (de verdad) una emisión de convertibles para una empresa tecnológica

Para el gran público, “obligaciones convertibles” suena a jerga financiera. En la práctica, es una vía intermedia entre deuda y capital: el inversor presta dinero a la empresa, pero con la opción (o el derecho, según condiciones) de convertir esa deuda en acciones en el futuro. En contextos de compañías tecnológicas cotizadas en mercados de crecimiento, este tipo de instrumento suele tener dos lecturas claras:

• Financiación con menos fricción que una ampliación de capital inmediata (porque la dilución no se materializa desde el primer día).
• Señal de confianza del inversor: Inveready no solo aporta fondos, también se posiciona para participar en el capital si la evolución de la compañía acompaña.

A cambio, el mercado asume un escenario posible de dilución futura si se produce la conversión, algo que normalmente se analiza en función del precio de conversión, la evolución bursátil y las necesidades de caja del negocio.

El factor europeo: InvestEU como “colchón” para movilizar inversión

Uno de los elementos diferenciales de esta financiación es el apoyo de la Unión Europea a través del fondo InvestEU, dentro del compartimento del Estado miembro español. Dicho de forma sencilla: no implica necesariamente que “Europa ponga el dinero” como tal en la empresa, pero sí actúa como mecanismo de respaldo para facilitar que este tipo de operaciones se cierren y escalen, especialmente cuando están orientadas a reforzar la competitividad, la digitalización y el tejido empresarial europeo.

Para una compañía como Gigas, que opera en un sector tan sensible como la infraestructura digital (cloud, continuidad de negocio, servicios gestionados), el encaje con las prioridades europeas —resiliencia, soberanía tecnológica, modernización empresarial— es evidente: no se trata solo de servidores, sino de la capacidad real de ejecutar proyectos y sostener crecimiento en un mercado donde la confianza y la inversión a medio plazo marcan la diferencia.

Inveready ya es un actor clave en el capital de Gigas

Esta inyección de 7,5 millones llega con un antecedente importante: Inveready elevó su participación en Gigas hasta el 32,27% tras una conversión de obligaciones en acciones y la correspondiente ampliación de capital realizada meses atrás. Es decir, no estamos ante un movimiento puntual, sino ante una relación inversor–compañía que se consolida y que, con esta nueva emisión, vuelve a reforzarse.

El accionariado de Gigas incluye además nombres relevantes del ecosistema empresarial español, como José Eulalio Poza, uno de los fundadores de MásMóvil (hoy integrada en Masorange), y Global Portfolio Investments, la patrimonial de la familia Domínguez de la Maza (grupo textil Mayoral). Esa combinación de perfiles —financieros, tecnológicos y empresariales— apunta a una compañía que busca crecer con estabilidad en un entorno donde el “cloud” se ha vuelto estratégico para casi cualquier sector.

Por qué esta operación importa más allá de la cifra

En el mercado tecnológico, 7,5 millones no parecen un número descomunal… hasta que se entiende el contexto: competir en cloud y servicios gestionados exige inversión constante en capacidad, producto, seguridad, soporte y operaciones. Además, la demanda de muchas empresas está cambiando: ya no se busca únicamente “alojamiento”, sino proveedores capaces de acompañar migraciones, diseñar arquitecturas híbridas, mejorar ciberresiliencia y ofrecer servicios con SLA y soporte real.

Por eso, este tipo de financiación suele leerse como una palanca para acelerar crecimiento sin renunciar a una disciplina financiera básica. Y también como un recordatorio: en tecnología, la carrera rara vez la gana quien tiene la mejor promesa comercial, sino quien puede ejecutar de forma consistente.

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Preguntas frecuentes

¿Qué es una obligación convertible y cómo afecta a los accionistas de Gigas?
Es deuda que puede transformarse en acciones. Si se convierte, puede implicar dilución para accionistas existentes, aunque depende del precio de conversión (en este caso 4,37 €/acción) y del volumen finalmente convertido.

¿Qué significa que la operación esté respaldada por InvestEU?
Que la financiación se apoya en un marco europeo diseñado para movilizar inversión y facilitar operaciones alineadas con prioridades como digitalización y competitividad. No implica necesariamente una “subvención directa”, pero sí un respaldo que ayuda a cerrar este tipo de acuerdos.

¿Por qué Gigas opta por convertibles en lugar de una ampliación de capital clásica?
Porque permite captar fondos ahora sin diluir de inmediato, dejando la conversión para más adelante (a partir del mes 19), cuando el mercado y la compañía puedan estar en otra fase.

¿En qué puede invertir Gigas estos 7,5 millones para crecer de forma orgánica?
En reforzar sus áreas de actividad (producto/servicio), capacidad operativa, seguridad, desarrollo comercial y ejecución de proyectos, especialmente en un mercado cloud donde la demanda de servicios gestionados sigue creciendo.

Fuente: Portal de inversos de Gigas