Tres vicepresidentes corporativos abandonan Intel Foundry, entre ellos el veterano Gary Patton, mientras la compañía recorta un 15 % de su plantilla global y reevalúa su estrategia de producción avanzada.
Intel enfrenta una nueva sacudida interna. Según ha confirmado la compañía a través de una comunicación interna recogida por Reuters, tres altos ejecutivos de Intel Foundry, su rama dedicada a la fabricación de chips para terceros, dejarán sus cargos en las próximas semanas. La salida más destacada es la de Gary Patton, vicepresidente corporativo (CVP) y director general de la Design Technology Platform, una figura reconocida en la industria por su trayectoria en IBM y GlobalFoundries.
A Patton se suman Kaizad Mistry y Ryan Russell, también vicepresidentes corporativos dentro del grupo de Desarrollo Tecnológico (Technology Development Group), responsables de áreas clave en el avance de los nodos de proceso. Las tres salidas se producen en medio de una reestructuración más amplia iniciada por Intel a principios de 2025.
Una pérdida estratégica en el corazón de la innovación
Gary Patton, que se incorporó a Intel en 2021 tras más de dos décadas en IBM y cinco años en GlobalFoundries, asumió en 2024 el liderazgo de toda la ingeniería de habilitación de diseño dentro de Intel Foundry. Su papel era fundamental: garantizar que los kits de diseño de proceso (PDKs), las bibliotecas IP y la validación con herramientas EDA fueran plenamente compatibles con los nodos de fabricación de Intel, permitiendo a los clientes diseñar chips eficientes y con altos niveles de rendimiento y producción.
Su salida, junto con las de Mistry y Russell, debilita temporalmente el liderazgo técnico de una división clave para el ambicioso objetivo de Intel: competir de tú a tú con TSMC y Samsung en el mercado global de fundición.
Relevo al frente del desarrollo tecnológico
Como parte de esta transición, Dr. Ann Kelleher, vicepresidenta ejecutiva que ha supervisado el desarrollo de procesos de fabricación desde 2020, también se retirará a finales de este año tras más de 30 años en la compañía. No obstante, Kelleher continuará como asesora estratégica en temas de capacidad fabril en EE. UU. y Europa.
Sus responsabilidades se dividirán entre dos nuevos líderes: Naga Chandrasekaran, que asumirá el desarrollo y fabricación de procesos front-end como responsable de Tecnología y Operaciones en Intel Foundry, y Navid Shahriari, que dirigirá las operaciones back-end, incluyendo ensamblado, pruebas y embalaje avanzado.
Chandrasekaran, ex ejecutivo de Micron, ha liderado desde mediados de 2024 la organización de fabricación y cadena de suministro de Intel, integrando la I+D de procesos con la producción a gran escala para mejorar la consistencia y los tiempos de rampa. Shahriari, por su parte, impulsará la estrategia de packaging de vanguardia y la integración de chiplets, pilares esenciales para el futuro diseño modular de procesadores.
Entre la incertidumbre fabril y los recortes masivos
Las salidas se producen en un momento crítico para Intel, que ha decidido detener sus proyectos de expansión en Europa —con plantas previstas en Alemania y Polonia— y ralentizar su crecimiento en Estados Unidos. La compañía también ha puesto en revisión el desarrollo del nodo 14A, clave en su hoja de ruta “5 nodos en 4 años (5N4Y)”, cuyo futuro dependerá de la obtención de al menos un cliente externo de gran volumen.
La presión financiera también ha llevado a Intel a lanzar un agresivo plan de reducción de costes: prevé recortar un 15 % de su plantilla global en 2025. Eso significa despedir a unos 30.000 empleados, dejando a la multinacional con unos 75.000 trabajadores al finalizar el año. Los recortes incluyen también despidos en personal de fábrica, con impacto previsto en más de 10.000 puestos.
Una transición con implicaciones globales
Intel Foundry representa una de las apuestas más ambiciosas de la compañía en su estrategia de reindustrialización de semiconductores en Occidente. Bajo el liderazgo de Pat Gelsinger, la firma busca posicionarse como un proveedor global para terceros en un mercado dominado por Asia, apoyándose en incentivos de Estados Unidos y la Unión Europea para reequilibrar la cadena de suministro.
Sin embargo, estas salidas de alto nivel y los ajustes en las operaciones plantean interrogantes sobre la velocidad y viabilidad del plan. El futuro de nodos avanzados como el 18A y 14A, la consolidación de Intel como actor competitivo frente a TSMC, y la capacidad de atraer clientes clave serán determinantes en los próximos meses.
Conclusión
La partida de figuras clave como Gary Patton marca un punto de inflexión en la evolución de Intel Foundry. La compañía se enfrenta al reto de mantener su ambiciosa hoja de ruta tecnológica mientras gestiona una transición de liderazgo y una reestructuración interna de gran calado. La industria observará con atención si Intel logra consolidar su apuesta por la fabricación avanzada y recuperar el liderazgo perdido en semiconductores.
vía: tomshardware