El Leibniz Supercomputing Center (LRZ), perteneciente a la Academia Bávara de Ciencias y Humanidades, ha encargado a Hewlett Packard Enterprise (HPE) la construcción de su próximo superordenador, llamado “Blue Lion”. Esta nueva infraestructura de alto rendimiento comenzará a operar en 2027 y estará destinada a apoyar la investigación de vanguardia en Baviera y en proyectos científicos nacionales como parte del Gauss Center for Supercomputing (GCS). La inversión total del proyecto asciende a 250 millones de euros, financiados conjuntamente por el Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) y el Ministerio Estatal de Ciencia y Arte de Baviera (StMWK).
Una arquitectura flexible para aplicaciones innovadoras
El diseño de Blue Lion combina flujos de trabajo clásicos de modelado y simulación con métodos avanzados de inteligencia artificial (IA). Esta integración permite a los investigadores ejecutar cálculos más complejos y analizar patrones en áreas como turbulencias, eventos climáticos y modelos predictivos, logrando resultados más rápidos y precisos.
El superordenador utilizará la tecnología HPE Cray con aceleradores y procesadores de última generación proporcionados por NVIDIA, y contará con el interconector HPE Slingshot, capaz de transferir datos a una velocidad de 400 gigabits por segundo entre las unidades de almacenamiento y computación. Estas características permitirán que Blue Lion alcance un rendimiento 30 veces superior al actual SuperMUC-NG, el superordenador actualmente operativo en el LRZ.
Innovación en programación
La interacción de aceleradores GPU y núcleos CPU en Blue Lion requiere nuevas técnicas de programación. Para facilitar esta transición, HPE implementará su Cray Programming Environment, que optimiza el código científico y ayuda a los investigadores a migrar sus aplicaciones. Además, a partir de 2025, se ofrecerán cursos y talleres de formación en el LRZ, permitiendo a los científicos aprovechar al máximo el nuevo sistema.
Eficiencia energética con refrigeración líquida
Uno de los aspectos más innovadores de Blue Lion será su sistema de refrigeración líquida directa al 100 %, donde agua a 40°C circulará por tuberías de cobre en los racks. Esta tecnología no solo reduce los costes operativos y las emisiones de CO₂, sino que también permite reutilizar el calor generado. Actualmente, el LRZ ya utiliza el calor residual de su superordenador para climatizar sus oficinas, y en el futuro podría suministrar energía térmica a organizaciones vecinas.
La eficiencia del sistema también se traduce en una mayor densidad en los armarios de servidores, lo que reduce la necesidad de espacio físico en las instalaciones.
Declaraciones
Prof. Dieter Kranzlmüller, director del LRZ, destacó la importancia de este avance:
“No se trata de tener el superordenador más rápido, sino de ofrecer el mejor soporte posible a la investigación de vanguardia con nuestra infraestructura de alto rendimiento”.
Por su parte, Heiko Meyer, vicepresidente ejecutivo de ventas en HPE, señaló:
“Blue Lion refuerza la posición de Alemania como líder en supercomputación e innovación en inteligencia artificial, estableciendo nuevos estándares para el futuro de la investigación científica”.
Finalmente, John Josephakis, vicepresidente global de ventas en NVIDIA, destacó:
“El enfoque en la eficiencia energética y la sostenibilidad permitirá a los investigadores abordar desafíos complejos en disciplinas que van desde la astrofísica hasta las ciencias de la vida”.
Un puente hacia la supercomputación del futuro
Con Blue Lion, el LRZ no solo incrementará su capacidad computacional, sino que también establecerá un referente en la integración de tecnologías sostenibles y de vanguardia. Esta infraestructura impulsará la investigación científica en Europa y contribuirá a resolver los desafíos más complejos del futuro en múltiples disciplinas.
El LRZ y HPE continúan demostrando que la supercomputación puede ser eficiente, silenciosa y fundamental para el avance del conocimiento y la innovación.