Se estima que hasta el 4% de la electricidad consumida a nivel mundial proviene directamente de los centros de datos y granjas de servidores, según datos recabados por cdmon mediante tecnología Blockchain. Esto equivale a más de 750 millones de toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera cada año. A pesar de que las emisiones derivadas de la producción eléctrica están disminuyendo —pasando de 547 gramos de CO2 por kWh en 2007 a 481 gramos en 2023, según Our World In Data—, la huella digital sigue siendo una de las grandes olvidadas en las estrategias de descarbonización de muchas empresas.
La necesidad de una infraestructura digital sostenible
El entorno digital se ha convertido en el motor de crecimiento de empresas de todos los tamaños, desde multinacionales hasta PYMES. La presencia online, la velocidad de carga o el rendimiento de los servidores suelen ser las prioridades. Sin embargo, pocas organizaciones incorporan la sostenibilidad a sus planes tecnológicos. Según datos de Climate Action Tracker, el calentamiento global proyectado para 2100 se ha reducido de 4,5 ºC (en el año 2000) a 2,8 ºC en 2024. Esta evolución favorable exige también que la infraestructura digital contribuya a reducir emisiones.
Desde cdmon, empresa líder en soluciones de hosting, se remarca la importancia de actuar sobre este ámbito. «El objetivo de cdmon siempre ha sido liderar con innovación y sostenibilidad en el sector del hosting web», afirma Marc Palau, cofundador de la compañía.
El impacto real de los centros de datos
En 2023, el planeta emitió 37.790 millones de toneladas de CO2, y entre un 1% y un 4% de esa cifra procede de granjas de servidores. Eso significa que la infraestructura digital global es responsable de más de 750 millones de toneladas de emisiones. Aunque las cifras se están reduciendo, la magnitud del impacto ambiental obliga a tomar medidas contundentes.
Una de las claves es la transición hacia fuentes de energía renovables. En este sentido, cdmon ha dado un paso adelante convirtiéndose en la primera empresa de hosting en España acreditada por la Green Web Foundation. Esto certifica que la totalidad de la energía utilizada en sus centros de datos procede de fuentes limpias y no fósiles.
La eficiencia energética: clave para la sostenibilidad
La apuesta por energías renovables es solo una parte del cambio. cdmon ha implementado procesos de optimización a nivel de software que requieren menos recursos de computación y ha seleccionado componentes con un menor impacto ambiental. Además, utiliza sistemas de refrigeración por agua, que permiten mantener temperaturas óptimas en los servidores sin recurrir a soluciones que disparen el consumo eléctrico.
“En un entorno donde la sostenibilidad será una ventaja competitiva, la eficiencia energética de los centros de datos y la optimización de la infraestructura son críticas”, destaca David Blanch, director digital de cdmon. Según el directivo, las empresas que no consideren la huella digital en sus planes estratégicos «enfrentarán regulaciones más estrictas, mayores costes operativos y una pérdida de atractivo frente a competidores más sostenibles».
El futuro: una infraestructura verde y consciente
La sostenibilidad corporativa se ha extendido a muchos ámbitos: construcción de edificios energéticamente eficientes, reducción del consumo de agua, transporte más limpio… Pero el ecosistema digital aún es un área pendiente. El uso intensivo de hosting, plataformas cloud, servidores de correo y aplicaciones de inteligencia artificial implica un consumo energético enorme que no siempre se visibiliza.
Desde cdmon insisten en la necesidad de que las empresas incluyan la sostenibilidad digital en sus políticas de descarbonización. Esto pasa por contratar servicios de hosting que utilicen energías 100% renovables, incorporar procesos tecnológicos optimizados y elegir componentes menos agresivos con el medio ambiente. Solo así será posible reducir la huella digital y contribuir a un futuro más sostenible sin renunciar a la innovación y al rendimiento.