La Unión Europea (UE) ha dado un paso significativo hacia la soberanía digital y la resiliencia tecnológica con la confirmación de dos importantes contratos que darán vida a IRIS², una constelación de satélites que garantizará comunicaciones seguras, rápidas y eficientes tanto para gobiernos como para empresas y ciudadanos europeos. Este sistema multiórbita contará con aproximadamente 300 satélites, distribuidos en órbitas baja y media terrestre, y su desarrollo está respaldado por un consorcio industrial liderado por SES, Eutelsat e Hispasat.
Un sistema estratégico para la autonomía europea
IRIS², acrónimo de “Infraestructura para la Resiliencia, Interconectividad y Seguridad por Satélite”, nace con el objetivo de proporcionar conectividad segura e ininterrumpida a nivel gubernamental y ofrecer servicios comerciales avanzados. Este nuevo sistema se convertirá en un activo estratégico para Europa, consolidándose como el tercer programa insignia de la UE en el ámbito espacial, junto con Copernicus (observación de la Tierra) y Galileo (navegación por satélite).
La constelación de IRIS² será lanzada mediante cohetes europeos y está diseñada para operar con una arquitectura interconectada que evitará la necesidad de contar con miles de satélites, mejorando la eficiencia y la seguridad. Además, se desarrollará una capa adicional de servicios en la órbita baja terrestre para ampliar su alcance.
Un proyecto colaborativo y multimillonario
El programa IRIS² cuenta con una inversión total de 10.600 millones de euros, financiados de la siguiente manera:
- 6.000 millones de euros aportados por la Unión Europea.
- 550 millones de euros proporcionados por la Agencia Espacial Europea (ESA).
- Más de 4.000 millones de euros procedentes del sector privado.
El contrato entre la Comisión Europea y el consorcio SpaceRISE (integrado por SES, Eutelsat e Hispasat) tiene una duración de 12 años. La ESA, con su amplia experiencia en programas espaciales, desempeñará un papel clave en la supervisión del desarrollo y validación del sistema, garantizando su éxito.
Según Josef Aschbacher, Director General de la ESA, “en un mundo geopolíticamente complejo, garantizar comunicaciones gubernamentales seguras y resilientes es fundamental. La ESA aportará su excelencia técnica para fomentar la innovación en la industria espacial europea y reforzar la competitividad del continente”.
Liderazgo industrial y cooperación europea
El proyecto IRIS² contará con la participación de fabricantes de satélites, pequeñas y medianas empresas, así como otros actores clave de la industria espacial europea. La implementación del sistema no solo fortalecerá la autonomía tecnológica del continente, sino que también impulsará la innovación, la creación de empleo y la competitividad en el mercado global.
Adel Al-Saleh, CEO de SES, afirmó que “IRIS² es un componente integral de la estrategia espacial europea y representa un modelo de colaboración eficaz entre los sectores público y privado”. Por su parte, Eva Berneke, CEO de Eutelsat, destacó que “el programa es una iniciativa histórica que refleja el compromiso europeo con la soberanía digital y la conectividad sostenible”.
Primer lanzamiento en 2029
Se espera que el primer lanzamiento de satélites de IRIS² tenga lugar en 2029, lo que marcará el inicio de una nueva era en la conectividad espacial europea. El sistema permitirá a la UE ofrecer servicios de comunicación de alta calidad para satisfacer las necesidades de sus gobiernos, empresas y ciudadanos, además de contribuir a cerrar la brecha digital en áreas remotas del continente.
Un futuro conectado y seguro
Con la puesta en marcha de IRIS², Europa no solo garantizará comunicaciones seguras y resilientes, sino que también fortalecerá su posición como líder en la industria espacial global. Este proyecto se convierte en un símbolo del avance tecnológico, la colaboración transnacional y el compromiso europeo con un futuro más conectado, innovador y autónomo.
IRIS² representa un hito en la historia espacial europea, asegurando que el continente esté preparado para los desafíos del mañana mientras refuerza su capacidad de respuesta en un escenario geopolítico cada vez más complejo.
vía: ESA.int