La empresa china de inteligencia artificial DeepSeek ha dado un nuevo giro al panorama global de la IA al utilizar los chips Ascend 910C de Huawei para tareas de inferencia en su modelo R1. Este movimiento no solo subraya la creciente capacidad tecnológica de China en el ámbito de la inteligencia artificial, sino que también evidencia la evolución de la industria local en los últimos meses, según informes recientes.
DeepSeek, conocida por su modelo de lenguaje avanzado R1, ha causado revuelo en los mercados internacionales al impactar significativamente en la bolsa estadounidense. El anuncio de su modelo R1 provocó una caída de 2 billones de dólares en el mercado de valores de EE.UU., generando preocupación entre los inversores. Sin embargo, el aspecto más destacado de esta historia es la colaboración de la firma china con Huawei, cuyo chip Ascend 910C se ha convertido en una pieza clave para la inferencia del modelo R1.
Según Alexander Doria, un experto en tecnología, DeepSeek ha entrenado su modelo utilizando los chips Nvidia H800, pero ha optado por los Ascend 910C de Huawei para las tareas de inferencia. Este dato es relevante, ya que Huawei ha posicionado sus chips como una alternativa de alto rendimiento a los aceleradores de IA de Nvidia, especialmente en el mercado chino, donde goza de una cuota de mercado considerable.
El Ascend 910C, considerado un rival directo del H100 de Nvidia, comenzaría su producción en masa en el primer trimestre de 2025. Firmas tecnológicas líderes como ByteDance y Tencent ya han mostrado interés en esta tecnología, lo que sugiere que Huawei está consolidando su posición como un actor clave en la industria de la IA en China.
Aunque los detalles sobre los recursos computacionales utilizados para entrenar el modelo R1 no están del todo claros, se sabe que DeepSeek dispone de más de 50.000 unidades de los chips H100 de Nvidia. Sin embargo, el hecho de que la empresa haya elegido los Ascend 910C para la inferencia refleja tanto la disponibilidad de estos chips en el mercado local como su competitividad en términos de coste frente a las alternativas de Nvidia.
Este desarrollo se enmarca en un contexto de creciente competencia global en el sector de la IA. Huawei ya está trabajando en la próxima generación de chips Ascend, que prometen rivalizar con los productos Blackwell de Nvidia, lo que podría intensificar aún más la competencia en este mercado estratégico.
En cuanto al modelo R1 de DeepSeek, si bien su impacto en los mercados financieros ha sido notable, persisten preguntas sobre los costes asociados y su papel en la caída de las acciones estadounidenses. No obstante, esta colaboración entre DeepSeek y Huawei podría impulsar una nueva ola de innovación en la industria de la IA en China, demostrando que el país está superando las limitaciones tecnológicas que enfrentaba en el pasado.
Este caso no solo destaca el avance tecnológico de China, sino que también pone de manifiesto cómo las empresas locales están consolidando su presencia en un mercado global dominado tradicionalmente por actores occidentales. Con aliados como Huawei, DeepSeek se perfila como un actor cada vez más influyente en la narrativa global de la inteligencia artificial.
