Cloudflare, la reconocida compañía global de servicios de ciberseguridad y rendimiento en la red, ha vuelto a sorprender con una nueva apuesta por la creatividad y la innovación tecnológica. En su sede europea, ubicada en Lisboa, ha inaugurado un espectacular «muro de entropía» formado por 50 máquinas de olas en constante movimiento. Esta instalación no es solo decorativa, sino que genera entropía para reforzar la seguridad criptográfica de Internet, integrándose en el conocido sistema LavaRand de la compañía.
Esta iniciativa se suma a las anteriores fuentes de entropía de Cloudflare, como las lámparas de lava en San Francisco, los péndulos caóticos de Londres o los arcoíris suspendidos en Austin. La idea, como explica el CEO de Cloudflare, Matthew Prince, nació en 2023 con una pregunta clave: “¿Qué elemento podría representar la identidad portuguesa al mismo tiempo que proporcionara aleatoriedad para nuestra infraestructura?” La respuesta fueron las olas, un símbolo inseparable de la cultura marítima de Portugal.
Tecnología y homenaje a la tradición marítima portuguesa
El muro de olas no solo refuerza la infraestructura criptográfica de Cloudflare, sino que rinde homenaje a los más de 600 años de historia marítima de Portugal. Desde las primeras expediciones a principios del siglo XV hasta las olas gigantes de Nazaré, la relación del país con el océano es profunda. Esta conexión también inspiró la arquitectura y el diseño del nuevo espacio, donde las formas curvas y los juegos de luces recuerdan constantemente al movimiento del agua.
La instalación se sitúa junto a la pantalla Radar Display de Cloudflare, que muestra datos globales del tráfico de Internet, con el majestuoso Puente 25 de Abril y el estuario del Tajo como telón de fondo.
Desafío técnico y artesanía especializada
La creación de las 50 máquinas de olas no fue una tarea sencilla. La compañía tuvo que colaborar con Hughes Wave Motion Machines, un pequeño taller estadounidense fundado por un exingeniero de Lockheed Martin, especializado en fabricar máquinas de movimiento de olas a medida. Tras cientos de horas de pruebas, ajustes y perfeccionamiento de la fórmula líquida, nacieron estas piezas únicas, capaces de funcionar sin interrupción.
Cada máquina mide 45 cm, contiene un medio litro de fluidos de colores verde, azul y el característico naranja corporativo de Cloudflare, y realiza hasta 20.000 balanceos al día, generando un flujo constante de datos aleatorios.
¿Cómo contribuye este muro a la seguridad de Internet?
La seguridad en la red depende de sistemas criptográficos que necesitan semillas de aleatoriedad de alta calidad. Cloudflare, a través de LavaRand, utiliza imágenes capturadas de estos dispositivos caóticos —como el nuevo muro de olas— para generar esta entropía. Las imágenes se procesan y convierten en cadenas de bytes aleatorios, que se distribuyen a los servidores para fortalecer la generación de claves criptográficas, protegiendo millones de transacciones y conexiones cada segundo.
Cuando un desarrollador utiliza funciones como Math.random()
en Cloudflare Workers, parte de esa aleatoriedad proviene, precisamente, de estos sistemas físicos. Incluso la API pública drand, utilizada por instituciones y empresas para obtener números aleatorios verificables, se nutre de las fuentes de entropía que la compañía mantiene activas en varias oficinas del mundo.
Un proyecto de colaboración y orgullo local
El diseño del espacio en Lisboa fue fruto de la colaboración entre el equipo interno de Cloudflare y estudios de arquitectura portugueses, destacando la participación de mujeres líderes en todas las etapas del proyecto. Las salas de reuniones llevan nombres de playas portuguesas, y cada detalle, desde la iluminación hasta el mobiliario, busca reforzar la sensación de movimiento y conexión con el océano.
La comunidad participa: eligiendo el nombre del muro de olas
Cloudflare ha invitado a su comunidad global a participar en la elección del nombre oficial para esta instalación. Entre las opciones figuran “Chaos Reef”, “Waves of Entropy” o “Wall of Waves”, entre otras. La votación sigue abierta y puede realizarse a través de un formulario en su web.
La innovación como seña de identidad
Este muro en Lisboa se convierte en otro hito que demuestra cómo Cloudflare combina innovación, tecnología y cultura local para proteger la infraestructura global de Internet. La empresa gestiona más de 71 millones de peticiones HTTP por segundo, cifra que llega a 100 millones en momentos pico, y todas esas comunicaciones dependen en parte de la robustez y la calidad de la entropía generada por iniciativas como esta.
vía: cloudflare