MetaX Integrated Circuits, una joven empresa de semiconductores con sede en Shanghái, se ha convertido en la nueva sensación de los mercados chinos. Especializada en GPUs para inteligencia artificial, la compañía ha despertado aún más interés entre los inversores minoristas que su rival Moore Threads en la antesala de su salida a bolsa.
Según la información remitida a la bolsa, MetaX atrajo 5,17 millones de inversores minoristas en su suscripción online, lo que se traduce en una tasa final de asignación de apenas el 0,033 %. Moore Threads, que debutó el viernes anterior, reunió a 4,82 millones de inversores, con una tasa de asignación del 0,036 %.
Fundada en 2020, MetaX es vista como una de las grandes esperanzas de China para desarrollar chips capaces de competir con los procesadores de alto rendimiento de NVIDIA, pieza clave en el actual boom de la IA generativa. La empresa planea captar 4.200 millones de yuanes (unos 594 millones de dólares) en su OPV, tras fijar el precio de salida en 104,66 yuanes por acción, lo que implica una valoración aproximada de 41.900 millones de yuanes.
El furor inversor refleja hasta qué punto la apuesta de Pekín por la autosuficiencia tecnológica, especialmente en semiconductores, está alimentando una auténtica fiebre por los valores locales del sector. En pleno choque tecnológico entre Estados Unidos y China, los pequeños inversores del continente están buscando rentabilidad en empresas que consideran estratégicas para el futuro del país.
El producto estrella de MetaX es su procesador de propósito general C600, presentado en julio. Este chip integra memoria de alto ancho de banda HBM3e y soporta precisión FP8, un formato que permite entrenar modelos de IA más rápido y con menor consumo energético. La compañía afirma que se trata de un chip “plenamente de fabricación nacional” y prevé iniciar su producción en masa en la primera mitad de 2026.
En su accionariado figuran algunos de los fondos de capital riesgo más destacados de China, como HongShan Capital Group (la antigua Sequoia China), Matrix Partners China, CTC Capital, ZhenFund y Lightspeed China Partners, además de vehículos estatales como el Shanghai Science and Technology Innovation Fund y el fondo del distrito de Pudong.
Las autoridades chinas llevan años empujando al capital privado hacia el objetivo de la autosuficiencia tecnológica, con especial énfasis en los semiconductores. MetaX y otros diseñadores de chips como Enflame y Biren Technology aspiran a seguir los pasos de Moore Threads con salidas a bolsa en Shanghái o Hong Kong, en su carrera por convertirse en “la NVIDIA china”.
En el Star Market de Shanghái, el parqué tecnológico donde cotizan este tipo de compañías, los inversores institucionales reciben asignaciones proporcionales, mientras que los minoristas acceden a las acciones mediante un sistema similar a un sorteo masivo.
El precedente de Moore Threads ayuda a explicar el entusiasmo actual. Pese al mal tono general del mercado, sus acciones comenzaron a cotizar el viernes a 650 yuanes, un salto del 468 % frente al precio de salida de 114,28 yuanes. Cada inversor que logró una asignación de 500 acciones ganó cerca de 270.000 yuanes en el estreno. La compañía recaudó 8.000 millones de yuanes (unos 1.130 millones de dólares), en la que ha sido la segunda mayor OPV del año en la China continental.
MetaX, sin embargo, sigue en números rojos debido al fuerte gasto en I+D y al dominio histórico de NVIDIA en el mercado chino. En 2024 registró unas pérdidas netas de 1.400 millones de yuanes, a pesar de multiplicar por más de diez sus ingresos hasta alcanzar los 743,1 millones de yuanes. En los nueve primeros meses de 2025, la empresa perdió 345,5 millones de yuanes, aunque su facturación creció más de un 400 % interanual. La propia compañía ha señalado que no espera alcanzar el punto de equilibrio antes de 2026.
vía: scmp