La compañía busca reducir el impacto de los nuevos gravámenes impuestos por la administración estadounidense sobre productos importados desde China e India
Apple está valorando expandir la producción de iPhones en Brasil como respuesta directa a los nuevos aranceles comerciales anunciados por el Gobierno de Estados Unidos. Según revelan fuentes consultadas por la revista brasileña Exame, la empresa californiana ya estudia cómo aumentar la capacidad de ensamblaje de sus dispositivos en el país sudamericano, lo que le permitiría minimizar los costes fiscales derivados de las importaciones desde China e India.
Una estrategia para sortear los aranceles de Trump
El presidente Donald Trump comunicó esta semana una nueva serie de aranceles que afectan a productos tecnológicos importados. Estos gravámenes suponen un duro golpe para fabricantes como Apple, cuyas cadenas de suministro dependen en gran medida de China. En concreto, los productos importados desde ese país serán gravados con un 34 % de impuestos, mientras que los procedentes de India soportarán un 26 %. En contraste, los aranceles para productos brasileños serán del 10 %.
Ante este escenario, Apple ve en Brasil una alternativa viable para reducir su exposición a estos costes. La empresa ya tiene presencia industrial en el país desde 2011, cuando se asoció con Foxconn para establecer una planta de ensamblaje en el estado de São Paulo. Hasta ahora, dicha planta se ha dedicado principalmente a producir modelos de entrada del iPhone para abastecer al mercado local.
Sin embargo, Exame informa que Apple busca ampliar esta operación. “La posibilidad de ampliar la producción en Brasil comenzó a estudiarse el año pasado, con mejoras en maquinaria y procesos industriales”, indica el medio.
El iPhone 16 también se ensamblará en suelo brasileño
Según documentos recientes, la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) de Brasil ha otorgado a Apple y Foxconn la certificación necesaria para ensamblar el iPhone 16 en el país. Modelos anteriores como el iPhone 13, iPhone 14 y iPhone 15 ya han sido producidos localmente. Ahora, por primera vez, también se planea fabricar versiones Pro de la línea iPhone 16 en Brasil.
El objetivo no es solo satisfacer la demanda interna brasileña, sino también convertir al país en un centro de exportación hacia Estados Unidos. Al hacerlo, Apple lograría reducir significativamente el impacto de los nuevos impuestos, al beneficiarse de la menor carga arancelaria aplicable a Brasil.
Caída bursátil y preocupación en el sector tecnológico
La noticia llega en un momento delicado para la firma de Cupertino. Desde el anuncio de los nuevos aranceles, las acciones de Apple han caído más de un 10 % y su capitalización bursátil ha perdido más de 300.000 millones de dólares. Otras grandes tecnológicas estadounidenses, como Nvidia, han sufrido pérdidas similares.
El efecto dominó ya se deja sentir: Nintendo ha pospuesto el lanzamiento de la Switch 2 en el mercado estadounidense, alegando incertidumbre sobre el contexto arancelario.
Brasil como nueva clave en la cadena global de suministro
Con una carga fiscal más baja que otros mercados asiáticos, Brasil podría ganar peso en la red global de ensamblaje de dispositivos tecnológicos. La apuesta de Apple por fortalecer su producción en el país sudamericano refuerza esta hipótesis y pone de relieve el cambio de estrategia de los gigantes tecnológicos ante la nueva realidad geopolítica.
De confirmarse estos planes, la planta de Foxconn en Brasil se convertiría en una de las pocas fuera de Asia capaces de producir modelos avanzados de iPhone, marcando un punto de inflexión en la estrategia industrial de Apple.
Mientras tanto, analistas y gobiernos observan con atención los movimientos del sector, que se ve forzado a adaptarse a una nueva era de tensiones comerciales, diversificación de la cadena de suministro y creciente regionalización de la producción tecnológica.
Fuente: 9to5mac