La disputa por el dominio del mercado cloud en el Reino Unido se intensifica mientras la CMA examina las barreras de entrada y el uso de licencias para mantener la posición dominante.
La batalla por el liderazgo en los servicios en la nube ha dado un nuevo giro. En el marco de la investigación que lleva a cabo la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido (CMA), Amazon Web Services (AWS) ha lanzado una dura crítica a Microsoft, acusándola de emplear prácticas de licenciamiento que “retienen” a sus clientes dentro de Azure. Según AWS, aproximadamente un 50 % de las cargas de trabajo actualmente en Azure migrarían a otros proveedores si los costes de licencia no fueran tan restrictivos.
Estas declaraciones se encuentran en las respuestas oficiales que AWS, Microsoft y Google han remitido a la CMA, como parte de su investigación iniciada en octubre de 2023 sobre posibles efectos negativos para la competencia en el mercado cloud del Reino Unido.
AWS: “Microsoft impide competir en igualdad”
AWS no ha escatimado en señalar directamente las barreras económicas que Microsoft impone a través de sus licencias, lo que, según argumenta, hace inviable para muchos clientes operar software de Microsoft fuera de Azure. Aunque AWS afirma tener clientes que ejecutan cargas de Microsoft en su plataforma, muchos más lo hacen en Azure debido a las diferencias de coste.
La compañía de Jeff Bezos también negó que haya una falta de competencia en el sector, alegando incluso que su cuota de mercado ha caído de forma significativa en los últimos años y subrayando que la verdadera competencia también proviene del retorno al on-premise. “No imponemos barreras técnicas que impidan la migración o el uso multicloud”, defiende AWS, que asegura haber invertido en herramientas que facilitan el cambio entre proveedores.
En cuanto a la inteligencia artificial, AWS minimizó la idea de un mercado específico para computación de IA de alto rendimiento. “La IA es simplemente computación, almacenamiento y red”, señaló, argumentando que su desarrollo está intensificando la competencia e incluso podría facilitar el cambio entre proveedores.
Microsoft: “El mercado es dinámico y competitivo”
Por su parte, Microsoft rechaza rotundamente que exista un problema de competencia, subrayando que tanto AWS como Google están bien posicionadas para competir en IA y que la intervención regulatoria podría dañar un mercado que todavía está evolucionando. También ha cuestionado que la CMA haya excluido a Google de la designación de “estatus de mercado estratégico” (SMS), y afirma que tanto Google como Amazon cuentan con márgenes y niveles de inversión comparables a los suyos.
Además, calificó de “vagas” las conclusiones provisionales de la CMA sobre licenciamiento, afirmando que no especifican claramente qué cargas de trabajo están afectadas, y negó que sus prácticas impidan competir eficazmente a sus rivales.
Google se alinea con AWS y acusa a Microsoft de abuso de posición dominante
Google ha sido tajante: Microsoft y AWS tienen un poder de mercado significativo en el Reino Unido y, sin cambios, Microsoft podría dominar el mercado cloud europeo en los próximos cinco años. La empresa de Alphabet ha denunciado que Microsoft está aprovechando su dominio en software para obtener ventajas injustas en el mercado de la nube, lo que perjudica a los consumidores y a la competencia.
Asimismo, Google respaldó las medidas provisionales propuestas por la CMA, especialmente en relación con las licencias, y propuso limitar la eliminación de tarifas de salida (egress fees) a AWS y Microsoft para no desestabilizar a los pequeños proveedores.
Una resolución esperada con gran impacto
La resolución final de la CMA podría tener repercusiones profundas en el modelo de negocio cloud de Microsoft, especialmente en su estrategia de licencias cruzadas. Tanto Google como AWS presionan para que se prohíban prácticas que limiten la portabilidad y el uso multicloud, abriendo así el mercado a una competencia más justa.
El caso británico se convierte así en un espejo para el resto de Europa y el mundo, donde cada vez más voces reclaman intervenciones regulatorias que frenen el poder de los gigantes tecnológicos en el ámbito del cloud computing.
fuente: DCD