
Interconexión vs capacidad: el equilibrio que define los “carrier hotels” y la nueva geografía de la Data Gravity — con Madrid en la primera línea europea
La economía digital se sostiene sobre dos fuerzas que no pueden separarse: capacidad e interconexión. De un lado, empresas, hyperscalers y proveedores de cloud necesitan megavatios y metros cuadrados para alojar cargas que crecen sin freno —IA, cloud native, analítica en tiempo real—. Del otro, dependen de ecosistemas densos de carriers, IXPs, nubes, cables submarinos y partners que mueven datos a la velocidad del negocio. Pensarlas como prioridades opuestas es el error habitual: sin capacidad no hay escala; sin interconexión no hay rendimiento. Los carrier hotels más icónicos del mundo —de 60 Hudson Street (Nueva York) a 350 East Cermak (Chicago), o 1 Wilshire (Los Ángeles)— han alcanzado ese estatus porque hacen ambas cosas a la vez. Y ese mismo