Lai Ching-te recuerda los antiguos vetos a fábricas en China mientras EE. UU. se replantea las ventas de Nvidia a Pekín
El presidente de Taiwán, Lai Ching-te, ha aprovechado una entrevista con el periodista Andrew Ross Sorkin en el DealBook Summit de The New York Times para lanzar un mensaje muy calculado al corazón de la guerra de los chips: los semiconductores son un recurso global que exige cooperación… pero también límites claros frente a China cuando hay riesgos estratégicos. Sus palabras llegan justo cuando Washington debate si flexibilizar las restricciones que impiden a Nvidia vender sus chips de inteligencia artificial más avanzados al mercado chino, un punto de fricción clave en la competencia tecnológica entre las dos grandes potencias. Semiconductores como “ecosistema global” En la entrevista, Lai evitó pronunciarse de forma directa sobre la política interna estadounidense —incluida la decisión