
Tesla simplifica su gama con ‘Standard’: una pausa estratégica antes del siguiente salto
Tesla ha movido ficha con una jugada tan táctica como reveladora: reordenar su catálogo en torno a acabados “Standard” para sus dos superventas, Model 3 y Model Y. Sobre el papel, es un gesto de racionalización de portafolio; en la práctica, la señal de un alto controlado para recalibrar precios, costes y expectativas antes de la próxima gran etapa —la que la propia compañía asocia con software, conducción autónoma y servicios—. La pregunta de fondo no es solo cuánto bajan los precios o qué equipamientos desaparecen, sino qué pretende proteger Tesla con este reseteo y qué prepara tras él. La decisión llega en un contexto exigente: un mercado global de eléctricos más competitivo y sensible al precio, una renovación de