Apple empieza a enviar sus servidores “Made in USA” a sus centros de datos: un hito industrial que ancla Apple Intelligence y su nube privada en casa
Apple ha cruzado un umbral simbólico y operativo: ya está enviando sus propios servidores fabricados en Estados Unidos a sus centros de datos. El anuncio, realizado por Tim Cook en X —“Los servidores avanzados hechos en EE. UU. ya están saliendo de nuestra nueva planta en Houston hacia los centros de datos de Apple”— marca el primer despliegue visible de una apuesta industrial de gran calado que la compañía ha atado a una inversión comprometida de 600.000 millones de dólares durante los próximos cuatro años. Más allá del titular, el movimiento encaja en la arquitectura técnica y estratégica que Apple ha diseñado para su desembarco en la IA de consumo bajo la marca Apple Intelligence y para su Private Cloud