
Intel logra acercar sus CPU al rendimiento de las GPU de NVIDIA en inteligencia artificial gracias a microkernels de 1 y 2 bits
La eterna batalla tecnológica entre CPU y GPU en el terreno de la inteligencia artificial acaba de dar un giro inesperado. Intel ha demostrado que sus procesadores convencionales, gracias a un rediseño de bajo nivel con microkernels optimizados, pueden ejecutar modelos de lenguaje de gran tamaño (LLM) a una velocidad que se acerca peligrosamente al rendimiento de la popular GPU NVIDIA A100, referencia durante años en el entrenamiento e inferencia de IA. No se trata de magia ni de un nuevo chip revolucionario. La clave está en cómo se multiplican las matrices dentro de la CPU. A través de microkernels escritos para aprovechar al máximo las instrucciones AVX2 y nuevas disposiciones de datos, Intel ha conseguido que modelos cuantizados en