
Un estudio revela las limitaciones ocultas de los SSD: mismos números, rendimientos radicalmente distintos
Durante años, las especificaciones de los fabricantes de unidades de estado sólido (SSD) han transmitido la idea de que todos los modelos con la misma capacidad y tecnología eran, en la práctica, equivalentes. Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad Técnica de Múnich y la Universidad de Copenhague demuestra que esta percepción es engañosa: dos SSD casi idénticos en papel pueden comportarse de forma radicalmente distinta en cargas reales de trabajo. El trabajo, publicado en Proceedings of the VLDB Endowment (PVLDB) bajo el título “SSD-iq: Uncovering the Hidden Side of SSD Performance”, introduce un nuevo benchmark —SSD-iq— diseñado para destapar esos “datos oscuros” que los tests tradicionales no muestran. La gran incógnita: ¿realmente importaba qué SSD elegir? La investigación