Durante su intervención en la feria tecnológica Computex 2025, el CEO de NVIDIA, Jensen Huang, lanzó una crítica frontal a las políticas de exportación de EE.UU. hacia China, afirmando que las restricciones impuestas están debilitando seriamente la competitividad de las empresas estadounidenses. El dato más contundente que expuso: NVIDIA ha pasado de controlar el 90% del mercado de chips para Inteligencia Artificial en China al 50% en menos de un año.
La caída no se debe, según Huang, a una competencia tecnológica directa, sino a decisiones geopolíticas que han impedido a NVIDIA operar libremente en el mercado chino. “Si el objetivo de las restricciones es garantizar que Estados Unidos siga liderando la IA, lo cierto es que nos están haciendo perder la ventaja”, sentenció el directivo.
La pérdida de cuota: ¿error estratégico o consecuencia buscada?
NVIDIA era, hasta hace muy poco, el actor dominante en el mercado chino de hardware para Inteligencia Artificial, gracias a sus potentes GPU de gama alta como las A100, H100 y las versiones adaptadas como las H20. Sin embargo, tras las restricciones impuestas por la administración Biden —continuando la línea dura iniciada por Trump—, las ventas a China se vieron limitadas por medidas de control de exportación que pretendían frenar el desarrollo tecnológico del país asiático.
El resultado, según Huang, ha sido el fortalecimiento de competidores locales como DeepSeek, que ya está comenzando a internacionalizar su tecnología tras entrar con fuerza en mercados como Malasia.
“Las suposiciones básicas que sustentaron estas restricciones eran erróneas. Hemos subestimado la capacidad de China para adaptarse y crear alternativas”, señaló Huang.
El verdadero campo de batalla: el empaquetado avanzado
Más allá de las tensiones geopolíticas, Huang centró buena parte de su discurso en lo que considera el núcleo del progreso en IA: las tecnologías de empaquetado avanzado como CoWoS (Chip on Wafer on Substrate) y su sucesor, SoW (System on Wafer). En palabras del CEO, “la Ley de Moore ha tocado techo”, y el futuro de los chips ya no depende tanto de cuántos transistores caben en un solo dado, sino de cómo se interconectan múltiples chiplets eficientemente.
“NVIDIA no tiene otra opción que usar CoWoS. Sin empaquetado avanzado, no podríamos mantener el ritmo de innovación que requiere la IA actual”, afirmó Huang durante la rueda de prensa.
Este tipo de tecnología, provista por TSMC, permite crear estructuras modulares de procesamiento mucho más potentes y escalables que los diseños tradicionales monolíticos. Según Huang, los sistemas como Grace Hopper o Blackwell no serían posibles sin estos avances.
¿Está China cerrando el ciclo completo?
Mientras EE.UU. impone restricciones y pierde terreno en un mercado estratégico, China sigue desarrollando su propia cadena de suministro para IA, desde silicio hasta frameworks de entrenamiento. La reciente expansión de sus chips y software en el Sudeste Asiático sugiere que el país podría estar completando su autonomía tecnológica, algo que antes parecía lejano.
Además, la adopción de tecnologías como RISC-V, así como sus avances en empaquetado local y litografías por debajo de 7 nm —a pesar de las sanciones—, refuerzan el argumento de Huang: el liderazgo en IA no se impone con bloqueos, sino con velocidad de adaptación e innovación real.
¿Qué significa esto para el futuro de NVIDIA?
A corto plazo, NVIDIA enfrenta un escenario incierto en China, uno de sus mercados clave. Aunque mantiene una posición dominante a nivel global, perder un 45% de cuota en el mayor mercado mundial de IA podría impactar sus ingresos y estrategias futuras. A largo plazo, el desafío no será solo competir con AMD, Intel o startups occidentales, sino también con una nueva generación de empresas chinas que han encontrado el estímulo perfecto para dejar de depender de Occidente.
Claves del mensaje de Huang en Computex 2025:
- Del 90% al 50% de cuota de mercado en China en menos de un año.
- Las restricciones de EE.UU. están “erosionando” la ventaja competitiva de empresas como NVIDIA.
- La clave del futuro de la IA está en el empaquetado avanzado, no en el silicio aislado.
- El ecosistema chino sigue creciendo y ya exporta tecnología a países como Malasia.
- La Ley de Moore ya no es suficiente: el futuro se juega en la arquitectura y conectividad.
Conclusión: Jensen Huang no solo ha dejado una crítica política, sino también una advertencia tecnológica. Mientras EE.UU. apuesta por el control, China acelera su desarrollo. Y si NVIDIA, el gigante que lideró la revolución de la IA, está perdiendo terreno, es momento de replantear las estrategias.
¿Quién ganará esta carrera? Como dice Huang: “No gana quien más bloquea, sino quien más rápido se adapta”.
vía: El Chapuzas informático y einformax