La reciente entrada en vigor de la Ley de una Europa Interoperable marca un hito significativo en la evolución del mercado único digital europeo. Aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 27 de febrero, la legislación se presenta como una solución integral para mejorar la conectividad y la eficiencia de los servicios públicos digitales a través de una mejor interoperabilidad y el intercambio transfronterizo de datos. Con un horizonte de implementación para 2030, la ley promete facilitar la vida de ciudadanos, empresas y Administraciones Públicas.
Desde la Comisión Europea (CE), se ha subrayado la importancia de esta ley, destacando que es fundamental para un mercado único digital operativo y para una aplicación más eficaz de las políticas públicas en sectores como la justicia, la sanidad y el transporte. La ley promete ahorros anuales significativos, estimados en hasta 5.000 millones de euros, gracias a la eficiencia que traerá la nueva regulación.
La nueva normativa introduce varios cambios disruptivos. Entre ellos, la reducción del tiempo de espera telefónica a un máximo de tres minutos, la prohibición del uso exclusivo de contestadores automáticos y la implementación de plazos más estrictos para responder a consultas y reclamaciones. Además, se establece que el 95% de las llamadas deben ser atendidas en menos de tres minutos y las reclamaciones resueltas en no más de 15 días.
En un esfuerzo por adaptar las administraciones públicas a esta nueva realidad digital, la ley también establece la creación de un marco cooperativo multinivel para fomentar la colaboración y el intercambio de soluciones interoperables. Se introducirán evaluaciones obligatorias de interoperabilidad desde el diseño y se creará un portal único que facilitará el intercambio y la reutilización de soluciones confiables entre administraciones.
Este conjunto de medidas refleja un compromiso profundo con la innovación y la digitalización de los servicios públicos en Europa. Con la implementación de la Ley de una Europa Interoperable, la CE busca no solo mejorar la conectividad y la eficiencia de los servicios públicos, sino también asegurar que Europa siga siendo líder en la transformación digital a nivel mundial, promoviendo un entorno más integrado y eficiente para todos sus ciudadanos y empresas.
Referencias: Administración Electrónica y Comisión Europea.