Intel ha confirmado que sus próximos procesadores Xeon «Granite Rapids» serán compatibles con la impresionante memoria DDR5-8800, según las especificaciones actualizadas de JEDEC. Este avance marca un hito significativo para el segmento de servidores, elevando las expectativas de rendimiento para la próxima generación de plataformas.

La serie «Xeon 6» de Intel, que presenta hasta 128 núcleos y 256 hilos, está diseñada para aprovechar las velocidades mejoradas de memoria que ahora alcanzan los 8800 MT/s, un salto considerable desde los 6800 MT/s. Esta actualización promete beneficiar enormemente a los servidores de alto rendimiento, especialmente aquellos dedicados a tareas intensivas de inteligencia artificial y aprendizaje automático, donde la velocidad de la memoria es crítica.

JEDEC, la asociación que define los estándares de memoria, ha publicado recientemente el estándar JESD79-5C DDR5 SDRAM que destaca por ampliar los parámetros de tiempo de la memoria y mejorar las características de seguridad. Estos avances son cruciales para las plataformas que manejan datos sensibles y cargas de trabajo exigentes.

Intel ha planificado el envío de los procesadores «Granite Rapids» con memoria DDR5-8800 para finales de este año 2024. Estos chips se han probado utilizando la arquitectura de núcleos Redwood Cove y han mostrado un rendimiento impresionante en las pruebas internas de Intel, denominadas Meta Llama 3. En estos tests, un CPU «Granite Rapids» con 120 núcleos y 240 hilos demostró su capacidad manejando hasta 1536 GB de memoria en una configuración 2S.

El lanzamiento de «Granite Rapids» no solo es un avance tecnológico significativo sino también un momento estratégico para Intel, que busca reafirmar su dominio en el mercado de servidores frente a competidores como AMD. Con esta nueva generación de procesadores, Intel no solo promete un rendimiento excepcional sino también una eficiencia y seguridad mejoradas, alineándose con las crecientes demandas del mercado de centros de datos modernos.