El auge de la inteligencia artificial (IA) está impulsando nuevas oleadas de innovación en toda Europa, pero muchas empresas están teniendo problemas con el lado menos publicitado de esta revolución tecnológica: los costes de la nube.
Nuestro último informe revela que el aumento de las facturas en la nube está actuando como una barrera significativa para la innovación en IA. El informe, que examina cómo las organizaciones europeas están desplegando modelos de IA generativa y aprendizaje automático, muestra que las empresas se están viendo obligadas a tomar decisiones difíciles debido al rápido aumento de los gastos operativos.
Impacto financiero e innovación
Según el estudio, el 45% de las organizaciones europeas están gastando más del 30% de su presupuesto anual de TI en servicios en la nube. Este nivel de gasto está haciendo que muchos reconsideren sus estrategias tecnológicas y una de cada tres empresas afirma que están ralentizando el desarrollo o la implementación de soluciones de IA debido a los altos costes.
Aunque la migración a la nube ha ofrecido beneficios en términos de escalabilidad y flexibilidad, ha quedado claro que muchos ejecutivos subestimaron los costes asociados, especialmente al trabajar con cargas de trabajo intensivas como las de IA.
Estrategias emergentes y repensar la nube
Muchas organizaciones están comenzando a revisar sus arquitecturas en la nube y a considerar nuevas opciones de infraestructura para reducir costes sin sacrificar rendimiento. Esto incluye mover ciertas cargas de trabajo fuera de entornos centralizados hacia soluciones más distribuidas o hacia la periferia (edge computing).
También se observa un crecimiento en el interés por modelos de nube híbrida y multi-nube como forma de optimizar costes, rendimiento y cumplimiento normativo. Estas estrategias están especialmente presentes en sectores como servicios financieros, atención sanitaria y manufactura, donde la eficiencia de costes y la privacidad de los datos son prioritarios.
Un enfoque europeo a la IA
El informe también destaca cómo las empresas europeas están tomando un enfoque más medido y centrado en la regulación en comparación con sus homólogas estadounidenses. Con iniciativas como la Ley de IA de la UE que entrará en vigor próximamente, muchas organizaciones están trabajando para incorporar principios de privacidad, transparencia y seguridad en sus despliegues desde el principio.
El futuro de la IA exige nuevo pensamiento en la nube
Lo que está claro es que, para desbloquear el verdadero potencial de la IA, las compañías europeas necesitan repensar cómo y dónde ejecutan sus cargas de trabajo. Optimizar costes en la nube no es simplemente una cuestión financiera, sino una barrera crítica que debe superarse para avanzar en la innovación de próxima generación.
Por nuestra parte, queremos ayudar a las organizaciones a explorar alternativas más eficientes mediante soluciones de computación en la nube distribuida con mayor rendimiento, seguridad y ahorro de costes.
Por Ari Weil, vicepresidente de Marketing de Producto de Akamai Technologies